Tia Penny lo reconoció y estalló de júbilo al verlo llegar corriendo. Júbilo reprimido por sostener las bolsas. Will, en su carrera, vio como Penny dejaba las bolsas en el suelo y le abría los brazos.
Will la abrazaba tanto que Penny le advirtió que la estaba ahogando. Se besaron y Will le cogió las bolsas y se las subió a casa.
Una vez en casa hubo charlas, más besos y más abrazos. Penny le sirvió un plato de sopa caliente la que Will tomó sin miramientos.
- ¿Está buena la sopa, Will? Preguntó la señora con dulzura
- Claro que sí, mamá, y más si la comparo con la del orfanato. Respondió francamente Will
- De eso quiero preguntarte, hijo. ¿Cómo es posible que estés aquí?, aún no tienes 18 años...
- Ya madre, verás. (Tras un momento de vacilación Will meditó si decirle la verdad o mantenerlo en secreto) Es una historia muy larga de contar. Mañana al desyuno te lo cuento (puesto que preveía que tendría consecuencias nefastas) ¿qué te parece?
- Me parece que algo ocultas, mañana me lo dirás. Ahora dúchate y descansa.
Will llevó su plato a la cocina y lo fregó, pues sabía a ciencia cierta que a la tia Penny no le gustaba acostarse con algo sin recoger. Se dirigió al servicio y se duchó. Inmediatamente después fue a dormir a, la que una vez fue, su habitación.
A la mañana siguiente Will se levantó con el aroma a café que inundaba la habitación. Retozó en la cama y se puso en pie. Se dirigía al baño cuando tia Penny lo vio y le increpó; "vamos dormilón"
Se acicaló y mirándose la barba que le estaba apareciendo se dijo así mismo; "nunca me voy a afeitar"
Salió del servicio y fue a la cocina donde Penny le tenía el desayuno. Se sentaron y hablaron con franqueza.
- Madre, respecto a lo de ayer...no voy a mentirla, pero no me juzgue sin saber la historia. Me echaron del orfanato porque maté a otro chaval.
- Pero Will, eres un estúpido. Una vida. Has quitado una vida, ¿no recuerdas el dolor que te produjo ver muerta a tu madre? ¿Cómo has podido?
- Pero madre...
- Que no soy tu madre.
- Si, para mí, sí.
- ¿Porqué Will, porqué?
- Estaba fumando, un chivato, una humillación...
- Ese carácter, Will, eres un irresponsable. Has perdido una esperanza de vida por tu orgullo...
Antes de irse Will le dijo que jamás la guardaría rencor, pues había sido su madre. Y que intentaría hablarla todos los días. Will la abrazó una vez más y la dijo que la quería y que le perdonara. Penny, lejos de arrepentirse, contestó con un: "Ve en paz, hijo mío" y se quedó con las ganas de contarle a Will la verdad, de una cosa que, tarde o temprano iba a llegar.
Will marchó. Con paso firme, sin mirar atrás. Intentando dejar su vida pasada. Borrarla.
Will fue en busca de un lugar para guarecerse del aún frío marzo. Atravesando el parque divisó el puente de la anterior noche y se dirigió hacia él. Una vez allí, y cernida la tarde se quedó durmiendo. Durmió y se despertó de noche, había perdido la noción del tiempo pues no tenía reloj. Se incorporó de la improvisada cama que se hizo y se disponía a salir cuando empezó a llover y tronar estruendosamente. Fue entonces cuando la lluvia no le daba de lleno, pero la humedad penetraba su ropa y, por ende, su cuerpo. Comenzó a tiritar de frío pasando así el resto de la noche,acurrucado en un ovillo, hasta que amaneció.
El día pintaba menos feo que el de ayer pues relucía el sol. Se vistió con ropa de recambio y se levantó. Will tenía hambre y frío por lo que se decidió a ir a robar algo de comer.
Al salir de la techumbre del puente un grupo de chavales se le acercó. Los chavales con actitud chulesca le pidieron todo lo que llevaba. La negativa de Will enfureció al cabecilla que le propinó un puñetazo que tumbó a Will. El resto de la pandilla se abalanzó sobre Will, que postrado lo único que hizo fue recibir patadas y puñetazos. La pandilla abrió la bolsa de Will y esparcieron las cosas. No se llevaron nada, pues no lo había.
Will estuvo tirado en el suelo varias horas hasta que un grupo de hombres le levantaron. Will aún sin conocimiento suplicó para que no le mataran. Con los ojos morados por los golpes no veía, pero oía a un hombre decir: "llevadlo allí, metedlo en el coche y vamos allí". Will quisiera haber sabido dónde iba, pero solo sintió que cuando le cogieron había vuelto a nacer